Cantabria llevará "en primavera" al Parlamento regional
su plan contra la economía sumergida para que los tres grupos con
representación en la Cámara (PP, PRC y PSOE) puedan realizar sus
aportaciones.
Así lo ha anunciado este lunes el presidente de Cantabria, Ignacio Diego, al ser preguntado por los resultados del estudio realizado por el Grupo de Investigación en Economía Pública de la Universidad de Cantabria (UC) que concluye que el volumen de economía sumergida se ha venido incrementando en estos últimos años y en 2012 superó ya el 24% del PIB (Producto Interior Bruto) regional, alcanzando una cifra superior a los 3.200 millones de euros.
Cuestionado por los medios de comunicación, Diego ha reconocido que este informe muestra que existe una "importante bolsa de fraude", si bien ha añadido que se trata de un "mal hábito" de la sociedad española que "no es precisamente nuevo".
El presidente regional ha explicado que, en estos
momentos, el plan está "en redacción" pero ha señalado que, aunque no
está concluido, se están llevando a cabo "inspecciones específicas" en determinados ámbitos que están dando ya resultados.
El informe
Titulado 'Una aproximación a la magnitud de la economía sumergida en
Cantabria (2009-2012)', el estudio estima que el incremento anual en el
volumen de economía sumergida fue del 6,30% de 2011 a 2012, una
situación que, según apunta, "tiene claros efectos perniciosos sobre la equidad, eficiencia y competitividad regional".
Según el informe, una hipotética reducción de unos 6 puntos del PIB en economía sumergida
(es decir, del actual 24,4% del PIB regional "sumergido" al 18,3%, que
es la media habitual de los 39 países más desarrollados del mundo)
supondría obtener así una recaudación tributaria adicional para Cantabria de unos 793 millones de euros y podría hacer bajar la presión fiscal media unos 8,55 puntos porcentuales.
Posibles causas
Sobre las causas del incremento de la economía "en la
sombra", el Grupo de Investigación en Economía Pública de la UC estima
que la cifra final de economía sumergida en
Cantabria en el año 2012 se debería en un 26,3% a la "elevada" presión
fiscal, un 30,9% al alto desempleo, un 22,7% a la caída del autoempleo y
un 20,1% a "un elemento residual pero significativo, como es la falta de ética fiscal y a la excesiva regulación económica y del mercado laboral".
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